Brompton lo quiere todo y probablemente lo tenga. Hasta corre el rumor de que cada vez que anuncia un nuevo modelo, agota sus existencias antes de fabricarlo. No ha pasado ni medio año desde que anunciara su bicicleta con 12 velocidades, una novedad que llevó a muchos apasionados de la marca a reconocer un deseo de diversificación en Brompton, enfocados hasta el momento exclusivamente en lo urbano, pero sin dejar de mirar cada vez más de frente al cicloturismo.
La nueva G Line pesa 13,9kg y su gemela eléctrica alcanza los 19,5kg incluyendo la batería
Ahora aparece la G Line y los rumores cobran sentido. Una extraordinaria renovación que añade al modelo original tres importantísimas características: las ruedas crecen y pasan de 16” a 20”, se instalan frenos de disco hidráulicos y se ofrece en tres tallas diferentes.
Esta última parte, las diferentes tallas (S, M y L), conviene explicarla. No hay tres tallas de cuadro, sino tres tallas de potencia y tres de tija dependiendo de la talla de bici elegida: la pequeña viene con una tija standard, la mediana con la tija extendida y, por último, la L, parece lógico, con una tija telescópica. Ahora sí tenemos ante nosotros una bicicleta muy versátil, fabricada para adaptarse a las necesidades de cualquier ciclista, sin importar su altura.
Las tres principales novedades de la G Line son las ruedas de 20”, los frenos de disco y las tres tallas disponibles.
Parecen cosas menores, pero no lo son. Si el plegado y la versatilidad de las Brompton de siempre ya habían conquistado de largo el ámbito urbano, con estas pequeñas renovaciones, ahora también se van a hacer con el cicloturismo, una actividad que cada vez está cobrando más importancia a nivel mundial.
Hay algún que otro detalle más para completar la novedad: los neumáticos son Schwalbe preparados para tubeless, el sistema de luces (delantera y trasera) está unido a la batería y, evidentemente, cambian las medidas. Tomando como referencia la de talla más pequeña, la bici, plegada ocupa 690mm de alto, 730mm de largo y 402mm de ancho. Por último, cambia, irremediablemente, el peso: 13,9Kg. Recordemos que una Brompton P Line con cuadro de acero, por ejemplo, está en torno a los 10kg.
Aún hay más cosas: Puños ergonómicos, sillín con base de carbono, más ancho y ligero, ambas características aplicables al nuevo manillar y pedales de plataforma ancha. Precisamente en los pedales haremos un inciso.
Fiel a las innovaciones de Brompton, el pedal izquierdo no es plegable, sino que es extraíble y se almacena en un enganche en la horquilla. Es una novedad que se decidió implementar en las bicis desde hace aproximadamente un año y que, a decir verdad, no entusiasma a todos los usuarios.
Con o sin motor
Hay dos opciones: G Line y Electric G Line. Además del motor tienen diferente sistema de cambio. La convencional ofrece un Shimano Alfine interno de ocho velocidades mientras que su hermana asistida cuenta con el sistema Brompton Advance de cuatro marchas.
”Es capaz de todo, desde moverse ágilmente en las calles de la ciudad hasta aventurarse en terrenos desconocidos” (Will Butler-Adams, Brompton)
En el sistema eléctrico encontramos otra novedad. El motor, de 250W y con tres niveles de asistencia, está en el buje trasero, en vez de en el delantero. Esto implica más estabilidad y más tracción en terrenos no asfaltados. La batería ofrece 345Wh y hablan de una autonomía que puede alcanzar los 60Km. Por cierto, todo el sistema se conecta por Bluetooth a la app Brompton Electric, así podrás actualizar todo de forma inalámbrica. La Electric G Line en talla pequeña pesa, batería incluida, 19,5kg.
Los accesorios y los precios
No viene sola la G Line. Se ha creado una línea completamente nueva y exclusiva para este lanzamiento de accesorios. Para que vaya bien vestida. Portabultos, guardabarros, varias bolsas diferentes, botellas de agua y hasta la posibilidad de albergar en el interior del cuadro un pequeño juego de herramientas.
La G Line costará unos 2.760€ y su versión eléctrica superará los 4.000€
Así que, aunque los primeros precios que hemos conocido están en libras y aún no sabemos cuál será el precio recomendado para el mercado español de cada una de ellas, podremos hacernos una idea: La G Line (no eléctrica), partirá de las 2.395 libras, lo que vienen a ser unos 2.760€. La Electric G Line estará desde 3.495 libras, es decir, unos 4.025€. Si queremos añadir guardabarros, portabultos y bolsas, iremos sumando más dinero al total.
Conócela en Sea Otter
La pasión con la que se está viviendo este paso adelante en la marca resulta más que evidente. El CEO de Brompton, Will Butler-Adams declaraba que "la G Line es la única bicicleta capaz de todo, desde moverse ágilmente en las calles de la ciudad hasta aventurarse en terrenos desconocidos. Hemos tomado lo que hace que una Brompton sea especial y lo hemos llevado más allá del entorno urbano, sin perder su capacidad de plegado rápido y compacto" concluía. Y tiene razón.
Pronto podremos probar la G Line de 20 pulgadas en ambas versiones, con y sin asistencia eléctrica. Será en Sea Otter, la feria que se celebra en Girona este mismo fin de semana (del 19 al 22 de septiembre).
Podremos entonces contarte también nuestras sensaciones sobre ella, aunque conociendo la marca como la conocemos, estamos convencidos de que serán excepcionales. De cualquier modo, estará disponible en las tiendas a partir de octubre. ¿Puedes aguantar?