Un policia municipal multó con 100 euros a Ivan González por comer un croissant mientras circulaba en bici por el centro de Sabadell, según ha recogido el Diari de Sabadell. La multa -por “conducción temeraria”– dejó perplejo a este vecino, más aún cuando vio la reacción del resto de los policías en la jefatura, igualmente extrañados. El ciclista ya ha anunciado que recurrirá la sanción.
Hablar con el móvil o comer mientras se monta en bicicleta se consideran conductas temerarias dado que el ciclista puede perder el control, poniendo el peligro al resto de usuarios de la via. Sin embargo, y al igual que Ivan González, muchos ven en este tipo de multas un claro abuso por parte de las autoridades. Algunos se han planteado hasta qué punto tomar, por ejemplo, una barrita energética -una imagen bastante usual en los ciclistas- también pueda ser penalizado con multa.