De Santander a Londres, de Londres a Bilbao, y de Bilbao a Barcelona. Fue el periplo que atravesó el cocinero cántabro Sergio Carasa antes de montar el negocio al que ahora dedica toda su energía: KRN Bikes. Una firma de bicicletas rebosante de personalidad con una máxima clara: dar a sus clientes lo mejor y de manera personalizada.
“Después de estudiar en la Escuela de Hostelería de Bilbao y trabajar como cocinero, decidí que quería relacionarme con otras personas que no se dedicaran al mundo de la hostelería. Fue una etapa bonita, pero muy dura a la vez: horarios interminables de 14 horas al día, trabajando en cocinas sin luz natural, con mucho calor, utilizando máquinas y herramientas cortantes, con jefes de cocina que mantenían a ralla a un montón de cocineros novatos para dar siempre la máxima calidad a sus clientes…” Había que cambiar.
Tras un periodo de reflexión, Sergio decidió que su futuro debía pasar por la bicicleta. “Gané bastante peso, y pensé en una formula rápida y divertida de adelgazar cobrando. Empecé a trabajar como bicimensajero ocho horas al día, cinco días a la semana. El cambio fue brutal: en seis meses adelgacé 20 kilos comiendo más de lo que estaba acostumbrado. Y me encantaba ese trabajo. La bicicleta cambió mi vida, hasta al punto de que decidí montar mi propia mensajería y la tienda de bicis I’m Bikes. Y de ahí, mi propia marca de bicicletas, KRN Bikes.
Componentes, cuadros, colores…
Toda esa experiencia y amor a la bicicleta se plasma en las bicicletas que hacen. “Ofrecemos bicis que el cliente puede comprar tal cual nosotros las montamos o que puede personalizar a su gusto, pudiendo elegir cuadros de diferentes modalidades, componentes y colores, para que nuestros clientes creen su bici a su gusto”. Y es que, si algo tienen claro en KRN, es que el cliente manda. “Nos adaptamos a sus preferencias, y ellos pueden ponerse en contacto con nuestros distribuidores oficiales, Im Bikes y Bcity, para variar cualquier elemento”:
Mientras que Bcity vende las KRN online, I’m Bikes las despacha, además de a través de la web, en una tienda física. Ubicada en la calle Maspons 12, sirve para que los clientes puedan ver y tocar las bicicletas. Y si quieren, salir rodando con ellas por la capital catalana. “Creo que Barcelona vive un momento muy bueno”, explica Sergio. “Hay muchos ciclistas urbanos, y cada vez hay más. La gente se ha dado cuenta de que la bici es el medio de transporte mas practico: tiene todas las ventajas y ningún inconveniente. El gobierno va poco a poco promocionando su uso, aunque según mi punto de vista creo que los que diseñan carriles bici en Barcelona no son ciclistas urbanos. Creo que otros países están mas avanzados que nosotros en este tema y tendríamos que aprender de ellos”.
Además de preciosas bicicletas, si te das una vuelta por Im Bikes, encontrarás el nuevo número de Ciclosfera. Y es que KRN Bikes es, desde ya mismo, uno de nuestros distribuidores oficiales. “En KRN Bikes luchamos por dar lo mejor. Distribuyendo Ciclosfera nos informamos nosotros y se informan nuestros clientes. Nos hace aprender, y ese aprendizaje nos permite poder informar mejor a nuestros clientes”.