Ha llovido mucho desde que, en 1997, Giancarlo Brocci diera forma a la primera edición de la Eroica, a buen seguro la carrera de bicicletas clásicas más célebre de todos los tiempos, .
Ahora, poco tiempo después de cumplirse 20 años de aquella idea prodigiosa que ha llevado la Eroica a todos los rincones del planeta -desde Italia hasta California, pasando por Sudáfrica,Uruguay, Inglaterra, Holanda o Barcelona- Brocci reflexiona en una interesante entrevista sobre las singulares características de la prueba.
“La tendencia es clara: la Eroica va a seguir creciendo como lo hemos hecho desde el principio con las diversas ediciones de Eroica en todo el mundo. Pero es igualmente importante hacer hincapié en mantener los valores de la prueba”, apunta Brocci.
“La bicicleta se ha convertido en el vehículo del futuro”
“Quienes no conocen la historia del ciclismo, aquellos que no han seguido su historia épica, ahora están descubriendo cuánto ha influido este deporte en las costumbres y los hábitos sociales”, explica Brocci. “La bicicleta se ha convertido en el vehículo del futuro, es una solución a los problemas de tráfico que están sofocando nuestras ciudades, es un medio para descubrir lentamente nuestro territorio y representa un estilo de vida saludable. El auge del ciclismo (y el de L’Eroica) se debe principalmente a esto”.
Hace 21 años, difícilmente el propio Brocci hubiera podido soñar con el éxito global de su idea. “Es cierto”, reconoce. “No había forma de imaginar nada de ese tipo. Pero, al mismo tiempo, si no fuera capaz de soñar con los ojos abiertos y de creer que tienes que insistir cuando sabes que estás haciendo algo bueno, nada de esto hubiera sido posible. Al fin y al cabo, el talento más importante de un ciclista heroico es, sin duda, la resistencia”.
No es es el único de los valores que impregan cada edición de la Eroica. Brocci los enumera con orgullo. “Redescubrir el corazón profundo del ciclismo, la fatiga, la aventura, el descubrimiento, lo inesperado, la solidaridad, la emoción de la conquista, el intercambio de dificultades… Todas estas cosas son patrimonio de nuestra comunidad de ciclistas y cada vez más de nuestros jóvenes. Hemos mejorado el ciclismo. Y no nos importa si algunas personas vienen a experimentar L’Eroica simplemente porque está de moda”.