No había nadie como él. El belga Edouard Louis Joseph Merckx, popularmente conocido como Eddy Merckx, dominó de forma aplastante el ciclismo profesional durante más de una década, desde 1965 hasta 1978. 1.800 carreras disputadas y 535 triunfos. Cinco Tours de Francia, otros tantos Giros, una Vuelta, siete Milán-San Remo, tres títulos mundiales, el récord de la hora… Literalmente, Merckx se comía a sus rivales: por algo le apodaron El Caníbal, un apelativo que a él nunca le gustó demasiado.
“Cualquier médico del mundo ha hecho cosas más importantes que yo”, ha declarado Merckx
“Merckx continúa haciendo soñar mientras que el ciclismo se ha vuelto inexorablemente aséptico, perdiendo el alma que el ciclista de Bruselas le había dado”, ha señalado el diario La Derniere Heure, que celebra el aniversario con un suplemento especial de 60 páginas. Todos los que fueran sus compañeros de pelotón, así como los ciclistas actuales, coinciden en señalar a Merckx como un auténtico referente y un deportista irrepetible.
El triunfo del hombre normal
Este miércoles, el inolvidable ciclista belga cumple 70 años. Cuatro décadas después de haber dejado el ciclismo profesional, Merckx ha superado un problema de obesidad gracias a una operación gástrica a la que se sometió en 2004. Y mantiene intacta la humildad que siempre le ha caracterizado. “Muchos me consideran el ciclista más grande de todos los tiempos, pero en el fondo eso no quiere decir gran cosa. Tenía un don del cielo y lo utilicé. No tuvo gran mérito: cualquier médico del mundo ha hecho cosas más importantes que yo”, ha declarado.
Nacido en 1945 en el seno de una familia de clase media, en 1963 se convierte en corredor amateur y, un año más tarde, tras proclamarse campeón del Mundo de aficionados, participa en los Juegos Olímpicos de Tokio, donde acabó en una discreta 12ª posición. En 1965 da el salto al ciclismo profesional, en el que ya nada volvería a ser lo mismo. Casado y padre de dos hijos, Sabina y Axel -este último también ciclista profesional, ya retirado-, Merckx sigue al frente de la empresa de fabricación y venta de bicicletas que él mismo fundó tras su retirada en 1978, Merckx Cycles.