Ubicada entre el antiguo cauce del río Turia al norte y el nuevo al sur, Mislata es una de las localidades que forman parte del área metropolitana de Valencia, con cuyo casco urbano se funde. Una ciudad de 43.000 habitantes que cuenta con una peculiaridad que la hace única: se trata del municipio con mayor densidad de población de toda España: nada menos que 20.894,17 habitantes por kilómetro cuadrado.
Toda esa gente, claro está, requiere de los mejores servicios. Y entre los indispensables con que debe contar toda localidad importante que se precie, una tienda de bicicletas de total confianza a la que poder llevar tu montura sabiendo que está en las mejores manos.
De Que Bikes, ubicada en el número 15 de la Avenida Vicente Blasco Ibáñez, abrió sus puertas el 11 de septiembre de 2011, aunque sus responsables llevaban un año trabajando a puerta cerrada, restaurando viejas bicicletas para amigos y conocidos. Desde entonces se ha convertido en un referente para todos los ciclistas de Valencia por su buen hacer y, sobre todo, por su apertura de miras: en De Que Bikes todas las bicicletas son bienvenidas, independientemente de su modalidad o precio.
“La verdad es que desde que abrimos la tienda ha ido todo hacia arriba: a día de hoy estamos desbordados”, cuenta Iván, uno de los fundadores de De Que Bikes, al echar la vista atrás. “Hemos cambiado un poco el proceso y la manera de funcionar de la tienda, porque empezamos muy centrados en la restauración y la personalización, especialmente en el mundo del piñón fijo, que ha bajado de forma importante. Ahora hacemos mucho más mantenimiento de horquillas, suspensiones, etc, especialmente de bicicletas de carretera y MTB. Prácticamente el 90% de nuestro mercado está en una gama un poco más alta. Eso sí: no hemos dejado de atender a bicis urbanas y fixed”, explica.
A pesar de ese cambio en el núcleo duro del trabajo, está claro que el ciclismo urbano en Valencia no para de crecer. “Eso ha hecho que la gente se vuelque cada vez más con el ciclismo urbano. Valencia es idónea para la bici. Es verdad que hay personas a las que les cuesta subirse a esa evolución, pero una vez lo prueban te das cuenta de que te cruzas la ciudad de punta a punta en 20 minutos”.
Ese auge se ha traducido en un inmenso crecimiento en el número de tiendas de bicicletas. “Hay muchísima saturación: al igual que abren, muchas cierran pasado poco tiempo”, reflexiona Iván. “Es algo exagerado: puedes encontrar 50 o 60 tiendas en un radio muy pequeño”. Y aun así, trabajo no falta: “Nosotros hacemos 60 o 70 bicicletas a la semana. Y hablo de reparaciones importantes, sin contar los pinchazos. Cada día viene más gente que no conocemos a la que le han recomendado la tienda. Incluso hemos pensado en cambiarnos de local para poder dar un mejor servicio”.
¿Cuál es, pues, el secreto para mantenerse a flote y seguir remando? “¿Sinceramente? No lo sé”, confiesa Iván. “Pero sí te puedo decir que intentamos hacer todos los días las cosas bien. Dar el mejor servicio y que el cliente tenga una solución que le dure mucho tiempo. Porque si no se van a otra tienda y no vuelven. Tenemos al cliente entre algodones, con el objetivo de que deposite toda su confianza en nosotros. Y eso lo aprecian y da sus frutos”.
La bici de tus sueños
Otra de las patas importantes de De Que Bikes es la customización de bicicletas. “Dejamos al cliente que se haga su propia idea. Cuando viene a la tienda le asesoramos para que obtenga la bicicleta que desea”, explica Iván.
En ese proceso, una pata importante es Ángel Beltrán, conocido por su inconfundible sello: Airbrush Customs. “Empezó con nosotros a pintar cuadros, y a día de hoy esta pintando bicicletas a una decena de famosos, e incluso mandando bicicletas a lugares como Dubai. De este tipo de personalizaciones hacemos una o dos a la semana. siempre de bicicletas de alta gama. Pero si alguien tiene una bici urbana barata, también estamos encantados de guiarle en el proceso”. El objetivo es claro: que cualquier que entre por la puerta pueda hacer realidad la bici de sus sueños.
Avenida Vicente Blasco Ibáñez, 15,
46920 Mislata (Valencia)