En los últimos años, Segovia ha estado elaborando carriles bici y planes de movilidad para conseguir que cada vez más personas usen la bicicleta como medio de transporte. El Bar Rubi es uno de esos sitios donde el ciclista se siente cómodo y donde podrá encontrar la revista Ciclosfera. Entramos y nos recibe Carlos Acero, su propietario, con una tapa de jamón.
Un bar cuya historia empieza en 1861. Se dice pronto. "Según creo, es la licencia de bar en activo más antigua de Segovia, y se trataría de una Taberna en el más amplio y antiguo sentido de la palabra". Esas son casi las primeras palabras de Carlos.
El Bar Rubi tiene la licencia de bar en activo más antigua de Segovia y distribuye Ciclosfera.
"Los mayores de hoy recuerdan la etapa de la segunda mitad del pasado siglo, cuando era regentado por el Señor Andrés y su mujer, con mano de hierro en lo moral, y los no tan mayores, tenían en el Bar Rubi su sitio donde pillar las litronas en su juventud. Para bien o para mal ahora es otra cosa" nos cuenta Carlos mientras nos saca otra tapa de jamón.
Pero al llegar 2011, en plena crisis, Carlos y otro compañero del mundo de la construcción se vieron fuera de sus empresas. Montar un bar entre ambos siempre fue una "fantasía por cumplir", así que, "viendo el panorama que teníamos por delante, decidimos emprender la aventura y probar suerte". Desde hace cinco años, es Carlos Acero el que se encarga, ya a solas, del Rubí, un lugar más moderno y abierto a todo tipo de público. "He apostado por crear un bar honesto, con ambiente amigable", dice Carlos. "Es el bar donde me gustaría estar si fuera cliente". Se hizo una fuerte apuesta por la buena música y por la cerveza artesana, "que ahora no suena tan raro, pero en su momento parecía una apuesta algo loca".
"Es el bar donde me gustaría estar si fuera cliente" (Carlos Acero, propietario del Rubi)
Las cervezas artesanas… ¿son una moda?
Viendo la cantidad de tipos de cerveza por la que puedes decidirte en el Rubi, nos preguntamos si esto de las artesanas es o no una moda y si ha venido para quedarse. "Ha habido un crecimiento importante en los últimos años, tan fuerte antes de la pandemia que podría parecer una moda, pero creo sinceramente que no lo es. De hecho, fijándonos en otros países, aquí aún hay mucho margen de crecimiento. Si por parte del sector se hacen las cosas bien, se seguirá ganando adeptos". Carlos se da la vuelta un segundo, nos sirve más jamón y continúa hablando: "Ya hay mucha gente a la que le gusta la cerveza, poco a poco hay que hacerles ver que las artesanas son eso, cerveza, solo que de muchos más estilos, ingredientes y matices de lo que están acostumbrados con la industrial".
Cervezas aparte, lo que no puedes perderte en el Rubi es la tapa de jamón. Donde esté un clásico, que se quite lo demás. Nosotros llevamos ya tres de esas tapas y no podemos parar. Es un lugar pequeño y no hay casi espacio, no hay cocina: "Eso nos limita muchísimo, pero en Segovia no se puede salir adelante sin ofrecer una tapa con cada consumición", sentencia Carlos y celebramos nosotros como clientes. Rubi está muy cerquita de la Plaza Mayor, rodeado de restaurantes de primera calidad. "Si las tapas no estuvieran a la altura, estaríamos perdidos, así que tenemos un pequeño surtido de tapas en las que lo que prima es un buen producto". Damos fe de estas declaraciones.
Si vas en bici, acabas en el Rubi
El Bar Rubi es donde el colectivo ciclista de Segovia, Bicicla, ha terminado bastantes de sus encuentros. "Hay también un grupo que hace todos los años una ruta monumental nocturna" (una pasada de ruta en Segovia, por cierto) "y en su parada en la Plaza siempre nos visita. Supongo que es la suma de dónde nos encontramos, cómo los tratamos, la cerveza y, por supuesto, el jamón".
"Creo que la cerveza es la reina de las bebidas para socializar, y concretando más, una lager de pocos grados fría es perfecta para eso y además para hidratarse después del esfuerzo físico. Y si los ciclistas son los que más esfuerzo realizan, pues da como resultado que la cerveza es ideal para después de una ruta en bici".
¿Y el ciclismo urbano en Segovia? ¿Va en aumento?
"Muy despacio y con no pocas dificultades" lamenta Carlos. "Es cierto que no es una ciudad ideal para la bici en cuanto a orografía, pero sí en cuanto a tamaño. En este último año se ha avanzado con un carril bici por parte del Ayuntamiento, es un primer paso, pero sin duda queda aún mucho en cuanto a infraestructuras y concienciación para que la gente lo use, y, sobre todo, de respeto de los que no lo usan. Todos envidiamos las ciudades en las que abunda el uso de la bici, y sin embargo luego no somos capaces de asimilarlo en el día a día en nuestra ciudad en cuanto a actitud".
De cualquier modo, el bar Rubi es perfecto para ir en bici. Está ubicado en un estrecho callejón en el que podrás tener tu bicicleta siempre a la vista y la terraza está en la mismísima Plaza Mayor de Segovia, con lo que te podrás tomar algo con la bici al lado y sin candar.
Hay Ciclosfera en el Rubi
"Me da envidia el ambiente y el ritmo de vida de las ciudades en las que abundan los ciclistas urbanos, y veo a Segovia una ciudad ideal para adoptarlo en el futuro. Ciclosfera hace una buena labor divulgadora de eso". Los ciclistas son buenos bebedores de cerveza así que, "puestos a tener material de lectura, que sea de algo que les guste".
Pues a nosotros también nos gusta el Rubi de Segovia, un sitio que no puedes dejar de visitar para tomarte una buena cerveza artesana, probar el jamón y, por supuesto, leer Ciclosfera. Estamos deseando volver. ¡Gracias, Carlos!.