El diseño de bicicletas sigue sorprendiéndonos. No hay día que no surja una nueva vuelta de tuerca, una nueva genialidad relacionada con las sinuosas formas de un vehículo cuyas posibilidades parecen inagotables.
Los arquitectos Atanas Zhelev, Mariya Korolova, del estudio vienés Digital Architects, y Martino Hutz, de Martino Hutz Architecture, han sido los últimos en sorprender al mundo con una bicicleta presentada en la Semana del Diseño de Milán. Aero es un prototipo que destaca por su llamativo y revolucionario cuadro, fabricado en madera compuesta, y para cuya construcción se han ido superponiendo y pegando láminas de madera de 0,9 mm. Las fibras naturales de cada lámina están alineadas en la dirección de la fuerza que se ejerce dentro del marco, lo que proporciona una resistencia adicional a toda la estructura.
“Aúna dos cualidades: funcionalidad y estética”, apuntan sus creadores
“La idea para esta bicicleta surgió mientras trabajábamos en la estructura de una casa de madera”, explica Zhelev. “Eso nos llevó a hacernos preguntas sobre las posibilidades de la madera aplicadas a un vehículo como la bicicleta, y a querer probar la resistencia del material a las diferentes fuerzas que se producen en el cuadro de una bici”. Su compañero, Martino Hutz, destaca las virtudes de Aero. “Creo que aúna perfectamente dos cualidades: funcionalidad y estética, a mitad de camino entre los planteamientos de la Bauhaus y de Oscar Niemeyer”.
Para verla en la calle… habrá que esperar
Por el momento, la Aero no está a la venta, aunque Zhelev y sus compañeros están trabajando en ello. “Nos gustaría que el precio fuera lo más ajustado posible, lo que va a depender mucho del lugar donde establezcamos la producción”, explica Zhelev. “Pero una cosa tenemos clara: queremos que el resultado final sea absolutamente fiel al prototipo, y que tenga la misma calidad y resistencia”.